Existen cientos y cientos de fobias, algunas habituales pero otras extrañas como ellas solas, con nombres raros y extravagantes. Una de estas fobias es la trezidavomartiofobia. Es el miedo al martes y 13, una superstición muy extendida en la población pero que normalmente no llega a convertirse en fobia en las personas que creen que este día da mal augurio.
La trezidavomartiofobia o miedo al martes y 13 no debe confundirse con otras fobias existentes muy parecidas. Por ejemplo, si hablamos de una persona que tiene una fobia al viernes 13 diríamos que tiene una parascevedecatriafobia (proviene del día Parasceve, que es el día de preparación para la Pascua) o una friggaatriscaidecafobia (proviene de Friday en inglés que a su vez proviene de la diosa nórdica Frigga). Sin embargo, si solo hablamos de la fobia al número 13 decimos que la persona tiene triscaidecafobia.
Martes y 13 y viernes 13, ¿son lo mismo?
Tanto el martes 13 como el viernes 13 han sido ambos las ovejas negras del calendario. Son considerados ambos como días de la mala suerte en los que es recomendado no aventurarse ni arriesgar demasiado. Pero, ¿cuál es el día original de la mala suerte? ¿el viernes o el martes? ¿hay uno que sea peor que otro? ¿o realmente es el número 13 el problema?
Pues lo cierto es que tanto uno como otro son ambos días oscuros en los que ocurrieron desgracias y por lo tanto se considera a los dos igual de malos.
El origen de martes y 13
"En martes 13, ni te cases ni te embarques, ni de tu casa te apartes." Seguro que te suena este dicho, ¿cierto? La historia de este día se remonta a la antigüedad, a las culturas clásicas. Martes proviene del latín Marte, que antiguamente era el dios de la guerra, por eso, se vinculaba ese día a un día en el que las pasiones de la sangre fluían y las personas eran más propensas a cometer actos violentos. Por otro lado, el número 13 siempre se ha considerado un número maldito por muchas razones:
-13 eran los invitados a la Última Cena.
-13 es el capítulo de la Biblia en el que se habla del anticristo, el diablo...
-El número 13 se corresponde a "la muerte" en el tarot.
-Martes 13 fue el día en el que aparecieron las confusiones de idiomas en la torre de Babel.
-Satán era el 13º ángel del cielo.
Y muchos ejemplos más...
El viernes 13
La mala suerte de este día nació a partir del viernes 13 de octubre del año 1307. Ese día la Santa Inquisición dio caza a la Orden de los Caballeros Templarios, fueron perseguidos por gran parte de Europa y la mayoría acabaron quemados en la hoguera. Se les acusó de traición y herejía, supuestamente por participar en celebraciones paganas, orinar en símbolos religiosos, hacer sodomia, etc.
Finalmente, aunque ambos tienen su propia fobia y etiqueta, lo cierto es que se pueden meter dentro del mismo saco porque es raro ver a alguien que tenga miedo al martes 13 y no al viernes 13. Las connotaciones negativas que se les atribuyen a ambos son idénticas y las personas que tienen miedo a uno también suelen tenerlo al otro.
Muchos días negros en la historia cayeron en martes o viernes 13 pero obviamente no hay argumentos científicos que prueben que estos días son peores que otros en lo que se refiere a mala suerte. Desgraciadamente, las personas tenemos una memoria selectiva y recordamos mejor las casualidades que la norma, por eso esta fobia sigue aun viva.
Consecuencias de esta superstición
Aunque el sentido común nos diga lo contrario lo cierto es que hay personas que viven con esta fobia y realmente lo pasan mal. Tal es el punto que en algunas construcciones la planta 13 se omite de manera que se salta directamente de la número 12 a la 14, ocurre en muchos hospitales y hoteles. También con el objetivo de llegar a un mayor número de clientes algunas compañías de vuelos internaciones no tienen fila 13 como Iberia, Emirates, Alitalia y Copa Airlines.
Otros ejemplos de la existencia de muchas personas que creen en esta superstición es que incluso hay ciudades que no tienen la Avenida 13. Tampoco existen cazas de combate que terminen en 13, por ejemplo, en la Alemania de Hitler el siguiente caza al He 112 fue el He 100 (se decía que Hitler era fóbico a este número).
¿Cómo vive una persona con trezidavomartiofobia?
Aunque nunca es agradable tener una fobia, lo cierto es que las personas que solo tengan miedo de forma específica a los martes 13 tienen en el fondo mucha suerte, ya que solo sentirán ese miedo irracional un día al año. Eso si, es un día muy intenso, en el que la persona prácticamente no hace nada.
Ese día los fóbicos se quedan en casa y evitan todo tipo de compromisos sociales, laborales o familiares. Intentan arreglarlo todo para que ese día puedan quedarse exclusivamente en casa y aun así toman medidas de seguridad estrictas dentro de ellas, como intentar no cocinar, poner aparatos eléctricos o ducharse. Ni que decir que los viajes y celebraciones que caen en ese día son pospuestos o directamente no se hacen.
¿Qué puedo hacer si soy demasiado supersticioso?
Si crees que eres demasiado supersticioso y este día realmente lo pasas mal tienes que plantearte la visión que tienes de la vida. Normalmente las personas que tienen esta fobia también tienen otras relacionadas con la suerte. Piensa acerca de ella e infórmate para saber de dónde vienen. Así al saber su origen podrás comprobar porqué antes se creía en ello pero porqué ahora no tiene sentido. Por ejemplo, ¿sabías que la superstición de abrir un paraguas dentro de casa proviene del s. XVIII en Londres? Los primeros paraguas fueron de metal, por lo tanto cuando se abrían dentro de las casas suponían un peligro potencial, hubo mucha gente que murió así. Por eso, se consideraba mala suerte. Sin embargo, ahora ya no es el caso. Después de informarte bien sobre ellos intenta analizar críticamente la superstición. Por ejemplo, una pata de conejo no debe de dar muy buena suerte si el conejo que la llevaba está muerto...
Reflexiona y haz una lista con los inconvenientes que te producen esas supersticiones, ¿quedarte ese martes y 13 en casa hace que falles en el trabajo? ¿te mete en problemas con tu pareja u otras personas? ¿te impide conseguir cosas? Valora los pros, los contras ¡y actúa!